ACEPTAR LA IMPERMANENCIA – Módulo 4 de Programa DESPIERTA. Presencial y On-line
«Aunque ames las bellas flores, igual se marchitan y mueren.
Aunque detestes la mala hierba, igual crece».
Maestro Dôgen (1200 – 1253) – Fundador de la escuela japonesa Sôtô, Zen
Dentro de unos días, el calendario nos indicará que termina este año para dar paso al siguiente. Es una convención que aceptamos con naturalidad. Nos suele gustar despedir el año que termina y celebrar la entrada de un nuevo ciclo de 365 días con festejos y alegría. Es una tradición que perdura desde hace siglos. En su origen, tiene que ver con la observación de los movimientos celestes que nuestros antepasados en todas las culturas estudiaron, y de donde surgieron los diferentes calendarios a lo largo del planeta.
Con relojes y calendarios medimos y nos orientamos en el tiempo. Lo que llamamos un día es el tiempo que tarda la Tierra en girar sobre sí misma, un año es el período en que la Tierra completa una nueva vuelta alrededor del sol. Días, estaciones, años….. se suceden sin descanso. Los días comienzan y terminan como también lo hacen las estaciones y los años. Y nosotros nos olvidamos a menudo de que estamos aquí durante un tiempo infinitamente pequeño si nos abrimos a la edad del Universo.
Todo evoluciona en ciclos desde siempre, todo aparece y desaparece sin cesar. Y una de las leyes que lo preside todo es LA REALIDAD DE LA IMPERMANENCIA.
Sin embargo, a nuestra mente le cuesta armonizar con esto. Queremos retener todo aquello que nos gusta o nos produce bienestar, placer, seguridad, y reaccionamos con apego resistiéndonos a dejarlo ir cuando termina. Y reaccionamos con rechazo cuando lo desagradable aparece y se mantiene más allá de lo que consideramos tolerable. Aceptar que lo agradable y lo desagradable aparece y desaparece sin cesar en nuestra vida y no siempre podemos hacer algo por cambiarlo es una de las lecciones más profundas y severas de la vida. Los años terminan, hayan sido duros o afortunados, simplemente la Tierra no se detiene en su viaje alrededor del sol.
La sociedad también se mueve en ciclos, con cambios bruscos o cambios paulatinos. Siempre ha habido crisis, guerras, catástrofes naturales y pandemias que repentinamente trastocan lo que llamamos normalidad. Ahora estamos en medio de uno de esos procesos en los que la vida cotidiana se ha visto afectada por los cambios, nuevas normas y restricciones y debajo la realidad de la enfermedad y de la muerte.
Necesitamos aprender a vivirlo, a aceptar que todo cambia.
Desde la Atención Plena o Mindfulness se cultivan actitudes que nos enseñan a armonizarnos con la Vida, a estar presentes en lo desagradable, y a ser conscientes de la benevolencia de la vida agradeciendo todo lo que nos ha sido dado.
En el Programa DESPIERTA de este 26 y 27 de diciembre (presencial y online en directo respectivamente) recordaremos la realidad de la Impermanencia para despedir este 2020 que termina. Nos despediremos de todo aquello que dejamos atrás y sembraremos las semillas para recibir el nuevo año con el corazón abierto. Como siempre, recorreremos prácticas formales de quietud y en movimiento y nos abriremos a la experiencia de nuestra humanidad compartida. Cerrando juntos una nueva vuelta alrededor del sol, sobre este bello planeta que compartimos por un tiempo.
Inmaculada Vallina